Aunque en 2018 esta actividad no produjo un gran impacto, creemos que este segundo año, seleccionando mejor las temáticas a abordar, puede hacer de esta iniciativa una buena forma de acercar la ciencia a la sociedad de forma dinámica y atractiva. La idea se centra en que uno o varios investigadores utilicen sus conocimientos científicos para explicar si las tramas, argumentos o determinadas secuencias de conocidas series de TV podrían ser reales o no. El formato, claramente audiovisual, pretende ser una serie de píldoras científicas dirigidas a todos los públicos donde los TV shows más importantes de los últimos años serán puestos en cuestión, ya que es de sobra conocido el hecho de que las series de televisión han ido ocupando un lugar muy importante en la vida socio-cultural de los ciudadanos. ¿Es posible que el ácido fluorhídrico haga que una bañera caiga de un segundo piso al primero? ¿seria posible que exista un parque de atracciones lleno de inteligencia artificial? ¿Podría un muro de hielo desplomarse con fuego en pocos minutos? Estas son algunas de las cuestiones que podríamos analizar.